En el midwest y el farwest de los Estados Unidos hay lugares cuya visita dejan recuerdos inolvidables, especialmente los Parques Nacionales.
En 2019 hicimos un corto viaje de siete días en auto con dos amigos, partiendo de Jackson Hole en Wyoming y terminando en la ciudad de Omaha, sobre el río Missouri, frente al estado de Iowa.
Llegamos en avión hasta el aeropuerto de Jackson Hole, en el extremo oeste del estado de Wyoming cerca del mediodía. Retiramos el auto en el aeropuerto y nos alojamos en la casa de unos amigos en Victor, a pocos kilómetros. Jackson Hole es particularmente bonito y cautivante, al pie de las montañas. Tiene turismo todo el año. En verano, que es cuando estuvimos, con toda la naturaleza en su esplendor. Mientras que, en invierno, las pistas de Ski son el centro de atracción.
Nos alojamos y compramos un mapa local para empezar a recorrer el Parque Nacional Grand Tetons. En la Oficina de Turismo la información es óptima. Planeamos la visita para la tarde de ese primer día y para todo el segundo día allí. Este parque nacional se caracteriza por tener cientos de kilómetros para practicar senderismo, muchísimos campings y unas vistas increíbles de uno de los ecosistemas más protegidos de Estados Unidos.
Al tercer día emprendimos camino rumbo al norte (apenas entrados en Idaho) hasta la entrada oeste del Parque Nacional Yellowstone que está en Wyoming, en su extremo noroccidental. Si se hospedan en Jackson Hole, deben cruzar la montaña rumbo al oeste y desde Victor subir hacia el norte.
Es un viaje de unas dos horas aproximadamente. Previamente reservamos hotel dentro del parque. Recomendación que les hacemos, sobre todo si van en temporada alta, tal como sucede en Yosemite y lo explicamos en este post. La belleza de este es tal que se hace muy difícil poder describirla: bosques, ríos de agua caliente, géiseres múltiples, lagos, cataratas, bisontes, aguas surgentes, etc, etc.
Pero lo más maravilloso es el “Old Faithfull”, géiser que lanza su chorro a más de 20 metros de altura y lo hace regularmente cada hora aproximadamente. Es fundamental que pasen por las oficinas del parque al entrar en el para obtener los mapas que permiten optimizar los recorridos.
El segundo día sirvió para que completáramos la visita sin estar a las corridas y para dirigirnos hacia el noreste del parque (Canyon Village y Tower Junction). Manadas de bisontes en el camino y poco a poco se sube la montaña, se pasa por Cooke City y se entra ya al estado de Montana. Terminamos el día alojándonos en un pueblo llamado Red Lodge, el más representativo del farwest, con sus fachadas típicas. Es sumamente pintoresco.
Ya transitando el quinto día y luego del desayuno partimos hacia el sur, entrando nuevamente a Wyoming para visitar la ciudad de Cody (aproximadamente una hora y media de auto). Ahí mismo, si les gustan los museos, les recomendamos el Museo del Far West (entre hora y hora y media).
Después del almuerzo, nuevamente hacia el norte entrando a Montana para visitar el sitio de la batalla de Little Big Horn, con su museo y vistas. Esta tuvo lugar el 25 y 26 de junio de 1876 entre el séptimo regimiento de la Caballería del Ejército, comandado por el Teniente Coronel George Custer y sus 700 hombres y los indios Cheyenne de Caballo Loco, los Lakota de Toro Sentado y los indios Arapajo. Los militares fueron masacrados, Custer murió en batalla y tanto él como su regimiento fueron iconos de valentía durante varios años en Estados Unidos.
Terminamos el día yendo hacia Dakota del Sur (al este) y nos alojamos en la ciudad de Rapid City. Desde aquí, con un mapa local que sacamos del hotel, visitamos las Black Hills y el famosísimo Mount Rushmore National Memoria. Se trata de una montaña tallada con las cabezas de 18 metros de altura de los presidentes Washington, Jefferson, Theodore Roosevelt y Lincoln. Un trabajo increíble hecho entre 1927 y 1941. Absolutamente imponente.
Inclusive si siguen el recorrido por este parque alcanzarán a ver el tallado de otra montaña en obra para la imagen de Toro Sentado.
Salimos para el Sur, entrando en Nebraska, con destino a Alliance. Fueron 250 km de ruta muy aburrida. Nebraska es parte del medio oeste y es muy llano. Recomendamos reserva previa en Alliance, ya que es un pueblo muy chico.
El séptimo día visitamos a la mañana un lugar bizarro, increíble. Se trata de “Carhenge”. En Inglaterra está el monumento neolitico de “Stonehenge” prehistórico y de fama mundial. En Alliance, un ingeniero que vivió muchos años en Gran Bretaña,hizo una réplica exacta. Lo increíble es que lo hizo con 38 autos y camionetas “vintage” en 1987, todos pintados de gris mate.
Aún más increíble es que dos de nosotros nos convertimos en los primeros argentinos en visitar el lugar (o al menos eso parece). En la infaltable tienda de souvenirs hay un planisferio con todos los países del mundo y chinches para que uno las coloque en el lugar donde uno vive. No había ninguna argentina. Ahora hay dos: una ubicada donde está Cafayate en Salta y la otra en Buenos Aires. Visita estimada entre una hora y dos, no más.
Para terminar el viaje tomamos el camino más directo al este hasta la ciudad de Omaha, sobre el río Missouri, frente a la cual ya es Iowa. Otra opción es terminar en Lincoln, la capital del estado. Si lo hacen duerman en una de las dos ciudades soñando todas las cosas lindas visitadas y, al día siguiente tendrán la libertad para escaparse de este texto. ¡¡¡Buen Viaje!!!
0 comentarios